Estructura paneles solares
Estructuras para placas solares de todo tipo, tanto para colocación en cubierta plana horizontal, como en cibiertas inclinadas. Garantía de 25 años.
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Más información sobre Estructura paneles solares
Si tiene que instalar paneles solares, necesitará una buena estructura metálica para soportar esos paneles. Olvídese de esos "inventos" de estructuras realizadas con perfiles de estantería. Quizá son algo más económicos, pero no cumplen con las normativas españolas ni europeas de seguridad o edificación. Es fácil que con una tormenta sus paneles se desprendan y provoquen un accidente, o simplemente los pierda o acaben destruidos. Utilice estructuras solares profesionales certificadas, y le aseguramos que núnca más deberá preocuparse por el anclaje de sus paneles.
Los paneles solares tienen garantías de hasta 25 años por encima del 90% de rendimiento. Esto quiere decir que un buen panel solar nunca se deberá desmontar de su estructura. Por esta razón, la estructura a la que ancle sus paneles solares deberá ser al menos tan resistente como estos. Nuestras estructuras solares están garantizadas por 25 años. No puede decirse lo mismo de un perfil de estantería: ni está preparado para las solicitaciones mecánicas que puede sufrir una estructura solar ni tampoco está preparado para soportar la corrosión de 25 años a la intemperie.
Tipos de estructuras solares
Las estructuras solares suelen clasificarse en dos bloques:
- Estructuras fijas: muy utilizadas en el ámbito de los módulos fotovoltaicos planos. Dotan a los paneles de ángulos fijos, determinados por la latitud del lugar, que maximizan la eficiencia de la instalación. Existen modelos para tejado, pared, suelo, poste e inclusive con integración arquitectónica.
- Estructuras móviles: su concepción es bastante distinta, gracias a uno o dos ejes móviles consiguen aumentar la captación solar de los módulos fotovoltaicos realizando un seguimiento del Sol (una forma similar al proceder de los girasoles, por ejemplo). Obviamente esta movilidad requiere de un consumo eléctrico y su mayor complejidad mecánica también conlleva más operaciones de mantenimiento.
Tipos de estructuras solares para placas solares por uso
Básicamente hay dos formas de instalar una serie de paneles solares: o bien sobre tejado de teja (viviendas) o chapa (naves industriales), o bien sobre tejados o azoteas planas (edificios), que se asemeja a la instalación en suelo, la cual obviaremos en este caso porque la solución es la misma.
En tejados inclinados, si el tejado dispone de la suficiente inclinación (20º a 30º)y la instalación está fundamentalmente dirigida al autoconsumo solar con conexión a red, se suele instalar el campo solar de forma coplanar, lo cual tambien es una ventaja arquitectónica, ya que la integración es más satisfactoria. Aqui usaremos estructuras solares coplanares.
Si la aplicación es para fotovoltaica aislada o la inclinación es baja, sobre todo en latitudes al norte de la península, es necesario dotarla de mayor inclinación (unos 45º-60º sobre la horizontal) para maximizar la energia generada en invierno, que va a marcar nuestra capacidad mínima de generación. Aqui usaremos estructuras solares para suelo.
En tejados planos o suelo podemos instalar estructuras solares sobre bordillos o piezas prefabricadas de hormigón, o bien directamente sobre el suelo, con anclajes químicos que aseguren la estanqueidad de la perforación, para asi evitar problemas de goteras y humedades. Son las denmominadas estructuras solares para cubierta plana.
Ventajas y desventajas de cada tipología de estructuras solares
Estructuras solares fijas
- Su coste es menor.
- La periodicidad del mantenimiento y el coste del mismo, también.
- Se trata de elementos de gran fiabilidad.
- No consumen energía.
- Su simplicidad también se traduce por lo general en menor peso (unos 60kg de “hierros” por cada kWp instalado, frente a los 150-250 kg por kWp en las instalaciones con seguimiento monoposte y horizontales respectivamente).
Estructuras solares móviles
- Aumentan la producción entre un 15-40%, dependiendo de la latitud de la ubicación de la instalación, de la época del año y del propio mecanismo de seguimiento. En nuestro ámbito, es muy raro ver estructuras móviles de más de un eje, ya que encarecen notablemente la instalación y su mantenimiento.
Objetivos de las estructuras solares en las instalaciones fotovoltaicas
Independientemente del tipo de estructura que escojamos, ésta debe proporcionar a los módulos fotovoltaicos la orientación correcta, la inclinación precisa, durabilidad en el tiempo y seguridad.
Situar correctamente nuestras estructuras no es un asunto baladí, en caso de hacerlo erróneamente daremos al traste con los cálculos realizados por el técnico y la producción de la instalación puede variar ostensiblemente. La inclinación, por ejemplo, debe adaptarse a la latitud de la instalación, pero también a la época del año en la que deseamos que la instalación funcione preferentemente.
Si se tratase de una instalación fotovoltaica aislada en la península, y su uso preferencial fuese anual, deberíamos dotar a la estructura soporte (y con ello a los paneles) de una inclinación de 60º, que sería en este caso el plano en el que más radiación se recibe en diciembre (el mes de menor radiación, y el “compromete” el uso anual de la instalación).
Entre módulo y módulo debe además dejarse cierta separación, generalmente de unos 10 mm, con el fin de facilitar la refrigeración de los módulos y a la vez reducir la presión que el viento ejerce sobre la superficie total (disminuyendo el conocido como “efecto vela”).
La estructura debe además calcularse debidamente para soportar el peso de los equipos, así como eventuales sobrecargas producidas por nieve, viento, y en ocasiones sismo.
Materiales empleados para la fabricación de estructuras solares
Aluminio
El aluminio posee la ventaja de ser un metal muy ligero, con una densidad de 2,70 g/cm3 a 20ºC, a igual solicitud de carga arroja unos pesos propios entre un 35-80% inferiores a sus homólogos en acero.
Además es un material resistente a la mayoría de formas de corrosión, un aspecto muy a tener en cuenta a la hora de instalar estructuras a la intemperie. La capa natural de óxido que se produce en él, conocida como alúmina, forma una barrera muy efectiva que protege al material.
Por otra parte posee excelentes cualidades físicas y químicas que le dotan de una muy elevada durabilidad y de gran estabilidad ante condiciones que pueden someter a los materiales a distintos tipos de degradación como los cambios de temperatura, la humedad, la radiación, etc. En resumidas cuentas y gracias a las cualidades mencionadas, posee una vida útil muy considerable y su mantenimiento es mínimo.
El aluminio además no es un manterial magnético, al contrario que el polvo de aluminio (muy inestable) es incombustible, no es tóxico y es un material totalmente reciclable. ¡Haciendo uso de él en nuestras isntalaciones renovables nuestra huella sobre el medio ambiente es aún menor! (aunque cierto es que el coste energético de producción del aluminio es elevado, pero en este caso no se trata de una lata de refresco de usar y tirar, sino que va a estar muuuchos años cumpliendo su función de apoyo en la generación de energía limpia).
Acero galvanizado y acero inoxidable
Las estructuras que emplean este material se diseñan con perfiles de acero de gran calidad galvanizado en caliente (según norma UNE-EN-1461), con un revestimiento de zinc que asegura la protección eficaz y eficiente contra las inclemencias de la climatología y asegura una mayor durabilidad y un menor mantenimiento.
El acero galvanizado es más barato que el aluminio, aunque presenta algunos problemas. Por ejemplo, si lo taladramos una vez galvanizado perderá su protección, por lo que se debe hilar fino en la fase de ingeniería. aluminio.
Si invertimos un poco más, podemos obtener estructuras de acero inoxidable y evitar esta problemática.
Hormigón
Se trata de productos prefabricados de hormigón especialmente diseñados para actuar como soporte en este campo. Ideal para cubiertas y superficies planas, simplifican el montaje y abaratan los costes. Con estos elementos se elimina la fijación del propio soporte o su anclaje, lo que también evita posibles problemas de afectar a la impermeabilización de la cubierta en el proceso de fijación.
La propia masa de las piezas de hormigón que ejerce como soporte, entre 50 y 75 Kg aproximadamente según pieza, es la que contrarresta la fuerza del viento y de otros agentes externos.
Estructura solar en bloque de hormigón, con todos los anclajes necesarios para la soportación de placas solares. Proporciona el lastrado necesario para la instalación de placas soalres en cubierta plana o suelo, cumpliendo normativa vigente.
La corrosión galvánica en estructuras solares
Cuando empleamos elementos metálicos debemos tener en cuenta algunas consideraciones para mitigar este efecto electroquímico que, aunque parece un tanto complejo de asumir, en síntesis produce corrosión cuando distintos materiales metálicos están en contacto (por ejemplo al hacer uso de una tornillería compuesta por un material que difiera del utilizado en la estructura).
Este problema puede revestir especial relevancia en regiones marítimas donde hay cloruros en suspensión, ya que el agua salada es un gran electrolito.
Existen distintos modos de prevenir este fenómeno, he aquí algunos ejemplos:
- No hacer uso de uniones conductoras eléctricamente (mediante plástico, por ejemplo)
- Utilizar materiales que, aún siendo distintos, no presenten diferencia de potencial. Cuanto más próximos entre sí estén los potenciales de dos metales, menor será ésta y menor también la corriente galvánica. Utilizar el mismo metal en todos los elementos de la estructura y tornillería sería la forma más precisa de evitar este tipo de corrosión.
- Evitar que se establezca electrolito alguno en la conexión entre materiales, por ejemplo revistiendo uno de ellos.
Geometría de las estructuras solares según cubierta
Otro aspecto a tener en cuenta es la tipología de la cubierta donde se va a realizar la instalación fotovoltaica en caso de que esa sea su ubicación. A fin de cuentas no pueden situarse del mismo modo paneles fotoltaicos en una cubierta plana que en una inclinada.
- Estructuras individuales: suelen dirigirse a terrazas o tejados planos qe no precisan colocar módulos en posición horizontal y cuando la cantidad de paneles a colocar no es muy elevada.
- Estructuras de triángulo inclinado: destinadas al mismo tipo de cubiertas que en el caso anterior, los módulos se colocan horizontalmente y son mucho más econmómica en caso de tener que instalar una cantidad mayor de módulos.
- Estructuras coplanares: ideales para cubiertas inclinadas, se adata al tejado manteniendo su inclinación y son sencillas y prácticas de instalar, reduciendo el impacto visual una vez instaladas.
Ahora que ya eres todo un experto en estructuras para paneles solares, puedes consultar nuestros productos en esta categoría en la tienda online de SOLARMAT,
O, si lo prefieres, podemos llevarte directamente a cualquier de las tipologías de estructuras que comercializamos según el tipo de cubierta que dispongas y/o el material empleado:
Soportes para placas solares con seguidor solar (móviles de un eje):
Esctructuras solares fijas en altura. Una variante de las estructuras fijas que proporciona gran protección anti-robo:
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Soportes para placas solares fijas para suelo:
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Estructuras solares fijas para cubiertas inclinadas (coplanares):
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Estructuras solares fijas para cubiertas planas:
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Estructuras solares para fijar en pared:
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Soportes para placas solares fijas de hormigón
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Actualización: 25/07/2022